
CÓMO VIVIR LA NAVIDAD EN UNA SOCIEDAD DE CONSUMO

Primera parte Por Víctor Rey R
Hoy la navidad sufre una gran distorsión en su real sentido. Cuando pensamos en la navidad inmediatamente vienen a nuestra mente Santa Claus o el Viejito Pascuero, los regalos y toda la fiebre consumista que se forma en torno a esta festividad.
Todo esto nos produce una carga alta de estrés y también angustia. Es necesario encontrar el verdadero sentido y compartirlos entre tantas personas que en esta fecha se encontrarán solos y deprimidos. Por otro lado hay que vivirlo con los más empobrecidos, los más vulnerables y los que se encuentran sin esperanza.


Esta buena noticia. No es sólo un sistema de ideas que se contrapone a los sistemas de ideas de hoy vigentes en el mundo. No es una ideología más en el supermercado intelectual y religioso del momento. Es un poder, es una forma de vivir y plantarse frente al mundo, es una comunidad que trasciende barreras.
Para recuperar el sentido vigoroso de un estilo de vida cristiano hay que sacar el Evangelio de manos de los vendedores profesionales que lo han vuelto un inocuo producto comercial que se ofrece al mejor postor y de los religiosos de turno que han sacado del centro de la navidad a Jesús.
Dondequiera un ser humano que invoca el nombre de Cristo se atreve a vivir por Él, se esfuerza por practicar sus demandas de amor, justicia, servicio y arrepentimiento; alza sus ojos con esperanza y vence el temor, allí es donde está avanzando el Evangelio.